Para los bizcochos:
- 325 g de harina de trigo floja
- 35 g de harina fina de maíz (tipo Maizena)
- 3 cucharaditas de levadura química (tipo Royal)
- ½ cucharadita de bicarbonato
- 225 g de mantequilla sin sal
- 300 g azúcar
- 6 Huevos M
- 2 cucharaditas de Vanilla en pasta Nielssen Massey
- 240 ml (1 cup) de leche entera
Receta para el frosting (Swuiss Meringue Buttercream):
- 200 g de claras de huevo pasteurizadas (claras de 6 huevos)* Temperatura ambiente
- 325 g de azúcar
- 325 g de mantequilla sin sal, cortada a daditos (ligeramente fría)
- 1 ½ cucharadita de
- Colorante en pasta azul turquesa Americolor
- Perlitas de azúcar para decorar (opcional) yo hice el corazón con Nonpareils de colores
Elaboración
De los bizcochos:
- Precalentamos el horno, colocamos la rejilla del horno a media altura. Temperatura a 180 grados.
- Engrasamos con spray desmoldante cuidadosamente 3 moldes bajitos para Layer de 15 cm.
- En un cuenco, tamizamos las harinas, la levadura química y la sal hasta 3 veces. Reservamos.
- En en cuenco de nuestra amasadora eléctrica con la pala, batimos la mantequilla a velocidad media durante 1-2 minutos hasta conseguir una consistencia cremosa.
- Seguidamente, añadimos el azúcar y seguimos batiendo a velocidad media-alta otros 3-5 minutos hasta que la mezcla adquiera una textura esponjosa y un color más pálido.
- A continuación, agregamos las yemas de huevo en dos tandas, batiendo con suavidad hasta incorporar por completo entre una tanda y la siguiente. Con una espátula , despegamos la masa del cuenco y la pala y batimos un poco más hasta conseguir una mezcla uniforme.
- Añadimos ahora el extracto de vainilla y mezclamos hasta conseguir una textura uniforme.
- Seguidamente, pasamos a incorporar la mezcla de ingredientes secos (punto 3) y la leche alternándolos de la siguiente manera: Empezamos con ⅓ de los ing. secos y mezclamos con suavidad hasta que queden más o menos integrados, seguimos con ½ de la leche y volvemos a mezclar lo justo hasta combinar, continuamos con el siguiente ⅓ de ing. secos, la otra ½ de la leche y el último ⅓ de ing. secos, mezclando después de cada adición lentamente hasta conseguir una masa más o menos uniforme. Es importante no excedernos batiendo en este último paso o de lo contrario acabaremos con una miga densa y nada esponjosa.
- Finalmente, repartimos la mezcla en 3 partes iguales entre los moldes que teníamos preparados (es muy útil contar una bascula, asegurándonos así de que los 3 bizcochos tendrán el mismo tamaño) y alisamos la superficie con una espátula de ángulo.
- Horneamos durante 30-35 minutos o hasta que al insertar una brocheta o un tester en el centro ésta salga limpia de migas.
- Una vez horneados nuestros bizcochos, los colocamos aún sus moldes sobre una rejilla y dejamos que se enfríen durante unos 10 minutos. pasado este tiempo, desmoldamos con cuidado y dejamos enfriar boca arriba por completo sobre la rejilla.
- Una vez fríos, los envolvemos en film transparente y refrigeramos al menos durante un par de horas (si puede ser toda la noche, mejor) antes de aplicar el frosting, así será más fácil a la hora de decorar y la miga se habrá asentado y acentuado su sabor.
Del frosting (Swuiss Meringue Buttercream):
- Siempre que vayamos a montar claras, hemos de empezar limpiando a fondo tanto el cuenco de nuestra amasadora eléctrica , así como todos los utensilios con los que trabajaremos (si fuera necesario, nos aseguraremos pasando un pedazo de papel de cocina impregnado en zumo de limón para eliminar cualquier posible rastro de grasa, pues ante la presencia del más mínimo indicio las claras no se montarían).
- Colocamos entonces las claras de huevo y el azúcar y lo calentamos al baño María sobre un recipiente con agua caliente (no ha de llegar a hervir), mezclando constante y suavemente con ayuda de unas varillas durante unos 8-10 minutos hasta alcanzar unos 70ºC (160°F). Aunque no es imprescindible, es más que aconsejable contar con un termómetro de azúcar , hemos de asegurarnos de que las claras están calientes y que el azúcar se ha disuelto por completo (se habrá formado una ligera espuma en la superficie).
- Seguidamente, colocamos el cuenco de la amasadora, equipada con el accesorio de varillas (en caso de utilizarla), y empezamos a montar las claras azucaradas durante unos 10 minutos; primero con suavidad e iremos incrementando la velocidad según vayamos avanzando, hasta conseguir un merengue de consistencia densa y aspecto satinado.
- Una vez la base del cuenco tenga una temperatura neutra al tacto, cambiamos las varillas por el accesorio de pala y batimos a baja velocidad mientras añadimos los dados de mantequilla de uno en uno hasta que quede todo perfectamente incorporado. Batiremos hasta obtener una mezcla de aspecto sedoso y brillante durante unos 8-10 minutos más. Llegará un punto en el que parezca que se ha echado a perder, pues tendrá un aspecto como si se hubiera “cortado”, pero no hemos nos desanimaremos, es totalmente normal; seguiremos batiendo hasta obtener la consistencia deseada. Si se siguen religiosamente todas las indicaciones anteriores, nunca falla.
- Agregamos ahora el extracto de vainilla y la sal y mezclamos un poco más a velocidad baja hasta que quede perfectamente combinado.
- Finalmente incorporamos el colorante (que iremos añadiendo progresivamente con la punta de un palillo hasta conseguir el color deseado) y mezclamos de nuevo hasta que nuestro frosting adquiera un color uniforme.
Montaje de la tarta:
- Con un cuchillo de sierra o una lira empezamos nivelando los bizcochos.
- Colocamos el primer bizcocho bien centrado sobre una base giratoria o en el plato sondo vayamos a servir nuestra tarta. Es conveniente aplicar previamente una pequeña cantidad de frosting en la base para evitar que el bizcocho se deslice mientras lo decoramos.
- A continuación, aplicamos una parte del frosting (aproximadamente ¼ del total) sobre la superficie del primer bizcocho y alisamos hasta nivelarlo lo máximos posible.
- Seguidamente, colocamos el segundo bizcocho sobre el anterior, perfectamente centrado, y aplicamos el frosting de la misma manera que con el primero.
- Finalmente, colocamos el tercer y último bizcocho y recubrimos ligeramente de nuevo con más frosting, esta vez incluyendo los laterales, pero sin esmerarnos demasiado aún en conseguir un acabado perfecto. Refrigeramos nuestra tarta durante 30 minutos.
- Finalmente, aplicamos lo que será la capa definitiva de frosting; podemos darle el toque final que más nos guste (perfectamente lisa o con algún diseño más decorativo), pero siempre procurando que quede lo más uniforme posible y recubra bien nuestra tarta.
- Si queremos incluir algún motivo decorativo adicional y unas perlitas de azúcar. Lista para servir y degustar.Se conserva refrigerada 3-4 días, pero la retiraremos del frigorífico unos 20-30 minutos antes de servir para que se aclimate a temperatura.